La infraestructura de recarga de vehículos eléctricos (VE) ha avanzado mucho en los últimos años. Hasta hace poco, la distribución de la energía en los puntos de recarga era fija, independientemente del tipo de vehículo o de la potencia requerida. Este planteamiento, que antes se consideraba la norma, está mostrando ahora sus límites a medida que la adopción de vehículos eléctricos sigue creciendo exponencialmente. Para satisfacer esta necesidad cada vez mayor de recarga, es necesario optimizar la distribución de energía para que el proceso de recarga se adapte mejor a las necesidades de cada vehículo y, por tanto, sea más eficiente.
¿Por qué una distribución inteligente de la energía?
Con un sistema de recarga tradicional, la potencia se distribuye de la misma manera a todos los vehículos eléctricos, lo que provoca un tiempo de carga no optimizado y una infrautilización de la potencia instalada cuando no todos los puntos de recarga están ocupados. Por el contrario, la gestión dinámica de la potencia permite distribuirla en función de las necesidades específicas de cada vehículo cuando hay varios conectados simultáneamente.
El sistema de distribución inteligente optimiza la asignación de potencia en función de las necesidades de carga de cada vehículo. Esto significa que si un vehículo necesita más potencia para recargarse rápidamente, el sistema le suministrará más potencia, mientras que otro vehículo que necesite menos potencia recibirá menos.
¿Cuáles son las ventajas para los propietarios de espacios comerciales y los usuarios?
Esta conversión de energía, que se realiza a distancia, tiene un doble beneficio tanto para los propietarios como para los automovilistas eléctricos. Para los propietarios, esta tecnología supone un uso más eficiente del espacio de aparcamiento, ya que los puntos de recarga requieren poco espacio en el suelo, liberando más espacio para otros usos. Para los conductores de vehículos eléctricos, esta solución significa cables de carga fáciles de manejar, lo que mejora su experiencia de uso.
¿Cómo funciona la distribución inteligente de energía?
La distribución dinámica de energía funciona utilizando microprocesadores en el armario eléctrico para regular la potencia entre los puntos de carga, en función de las necesidades energéticas de los vehículos conectados. He aquí cómo funciona en detalle:
- Conversión CA/CC: la fuente de alimentación de la estación recibe corriente alterna (CA) de la red eléctrica. Los módulos de potencia del armario eléctrico convierten la corriente alterna en corriente continua (CC), necesaria para recargar las baterías de los vehículos eléctricos.
- Distribución de la energía: una vez completada la conversión, los microprocesadores controlan constantemente la demanda de energía de los vehículos conectados a los puntos de recarga. Regulan la potencia entre los puntos de carga en función de estas necesidades, optimizando la distribución de la potencia para minimizar los tiempos de carga y evitar que se consuma demasiada energía de la red al mismo tiempo para no sobrecargar el sistema eléctrico.
- Conversión para carga rápida: cuando los vehículos cargan en estaciones de CA, la energía absorbida es convertida por el convertidor interno del vehículo, que generalmente tiene una capacidad de conversión limitada. Sin embargo, para permitir una carga de alta potencia, las estaciones de carga rápida convierten la energía antes de enviarla a la batería del vehículo. Esto elimina las limitaciones de los convertidores internos del vehículo y permite una carga más rápida y eficiente.
Powerdot instala puntos de carga Kempower, I-charging y Starcharge con esta distribución inteligente de energía. Esto permite a los propietarios de espacios comerciales gestionar su infraestructura de forma más eficiente, al tiempo que ofrece a los automovilistas una experiencia de recarga óptima. Si es propietario de un aparcamiento comercial y está interesado en instalar un punto de recarga, puede ponerse en contacto con nosotros aquí y ayudar a promover la movilidad sostenible.
