Somos el mayor operador independiente de cargadores en Europa.
Nuestra Historia
Powerdot comenzó en el año 2018 en Portugal, con la ambición de llevar soluciones de carga para vehículos eléctricos a espacios comerciales y de retail. Con una solución llave en mano, Powerdot comenzó a ofrecer una gama completa de servicios que van desde la instalación, operación y mantenimiento de estaciones de carga a coste 0 para los socios y con reparto de ingresos. Esta propuesta de valor única nos ha permitido ser uno de los CPOs (Operadores de Puntos de Carga) más importantes y de mayor crecimiento en España y otros mercados europeos, centrando nuestra propuesta de valor en complementar la experiencia de compra de los clientes de nuestros asociados.
En 2020, con la experiencia y la posición que acumulamos en Portugal, empezamos a buscar ampliar nuestra presencia a otros países. Iniciamos nuestra expansión hacia España, Francia, Bélgica, Luxemburgo y Polonia.
En 2022, Antin Infrastructure Partners invirtió 150 millones de euros en Powerdot. En febrero 2024, el Grupo Arié y Antin Infrastructure Partners invirtieron otros 100 millones de euros en la empresa para impulsar el desarrollo de nuevas tecnologías, ampliar la infraestructura de carga y reforzar las asociaciones estratégicas de la empresa en toda Europa.
En agosto de 2024, Powerdot aseguró una financiación verde de 165 millones de euros de ABN Amro, BNP Paribas, ING, MUFG Bank, Santander y Société Générale. Esta inversión significativa permitirá acelerar el despliegue de infraestructura de carga para vehículos eléctricos en toda Europa, apoyando la transición hacia una economía de bajas emisiones de carbono y haciendo que la carga sea más accesible y sostenible en espacios comerciales y minoristas. Con esta financiación, Powerdot está ahora aún mejor preparada para expandir su presencia, ofrecer soluciones de carga de última generación y continuar su compromiso con la innovación y la movilidad sostenible.
Carga en destino
Para hacer realidad esta visión, diseñamos experiencias de carga que complementan las rutinas diarias del usuario. Sin pérdidas de tiempo en esperas, desvíos ni planificación. Al tener un punto de recarga donde los usuarios ya están yendo (supermercados, centros comerciales, restaurantes, oficinas, tiendas especializadas etc.), la vida no se detiene. No hay peor sensación que la de estar atascado cuando uno quiere -y necesita- avanzar. La carga en destino tiene el potencial de trastocar el escenario actual y fomentar el aumento de coches eléctricos en circulación, puesto que la preocupación sobre dónde cargar ya no será un problema.
Nuestro impacto
Objetivo de implantación de puntos de recarga para 2025: 15.000
Objetivo de implantación de puntos de recarga para 2030: 19.000